Uno de los objetivos más ansiados por parte de todos los agentes involucrados en el sector de las casas de apuestas y de los juegos de azar, es la búsqueda del juego responsable. Llegando a este punto estaría más que garantizado el crecimiento exponencial sostenible de esta actividad como viene siendo costumbre en la última década, además de garantizar la salubridad de la totalidad de los usuarios de las plataformas de casino online DGOJ y de los sitios de betting. Todo ello alejaría voces críticas interesadas que buscan hacer daño a un sector económico, que puede ser la principal fuente de crecimiento de muchas naciones a nivel mundial en los años venideros.
Muchas son las medidas propuestas que ya se están llevando a cabo para la búsqueda de ese objetivo final del juego responsable, pero el sector debe ser ambicioso y dar un paso más para certificar al cien por ciento que todos los clientes están bajo la tutela de organismos de control, a fin de que no incurran en malas prácticas.
En este sentido, uno de los operadores de juego online que más lucha por conseguir este hito, PAF, pone encima de la mesa una medida que podría ser la definitiva si es que se tiene en consideración. Por norma general todas las propuestas racionales en cualquier ámbito pueden sumar siendo útiles y la de poner límites a las pérdidas (ya os hemos hablado de la verificación de identidad) en las que puede incurrir un cliente cuando accede a estos servicios de ocio, se ubica dentro de este tipo de premisas en el sector del juego.
La PAF a través de una de sus responsables Ekaterina Ivanova incide en la necesidad de implantar medidas concretas, siendo el control del límite de las pérdidas la joya de la corona que puede encontrar la solución definitiva a las disfunciones del sector. Por ello, Ivanova postula que “nos estamos quedando atrás con la prevención y el tratamiento desde una perspectiva de salud pública. Mis colegas estarían de acuerdo en que los problemas de juego no se toman tan en serio como, por ejemplo, el abuso del alcohol. Esta actitud se refleja, a cambio, en aquellos afectados por el juego, donde todavía se puede ver más como un problema de carácter para esas personas que como una enfermedad”.
Muchos otros agentes abogan por los límites en el juego voluntario, pero lo cierto es que este hecho no da el resultado esperado según numerosos estudios de campo. “Los límites de juego voluntario simplemente no parecen producir un efecto deseable. Toda la investigación recopilada respalda este hecho”, añade Ekaterina Ivanova.
El crecimiento del sector del juego y de las casas de apuestas online requiere que se establezca una legislación clara para proteger a todos los agentes involucrados en esta actividad. El eslabón de los clientes, también necesita ciertas medidas para impedir que caigan en malas prácticas. Por ello el sector debe aunar esfuerzos y remar todos en la misma dirección que tiene como meta el juego responsable.
